Una sirena al borde del sueño...
El marinero la mira, se resguarda en su canto, más allá del tiempo y la vida.
y sella ese amor... Lo almacena en el viento y se hace acompañar de él, cada tarde...
El marinero la mira, se resguarda en su canto, más allá del tiempo y la vida.
y sella ese amor... Lo almacena en el viento y se hace acompañar de él, cada tarde...
Abraza también en silencio y para si, ese cuerpo distante y sin pisadas...
Pero al cantar, él sabe que es sólo ese momento el que desea guardar para siempre...
Como si toda la vida fuera azul y olas, labios y sonidos temblorosos...
Pero al cantar, él sabe que es sólo ese momento el que desea guardar para siempre...
Como si toda la vida fuera azul y olas, labios y sonidos temblorosos...
¡Quiere ser un pez o una estrella marina para amarla entre las rocas... !
Ella en cambio, en su alma de mujer , se pregunta, "¿qué puede ser el amor para un hombre... ?"
¿Será que existe duración y cercanía para ellos?...
¿o será el amor un pétalo desnudo a la orilla de la playa, indefenso y blanco atravezando el azar... inevitablemente?
Sólo el mar conoce la respuesta.
4 comentarios:
Recuerdas todos los antiguos cuentos de sirenas y marineros, ya en la mitología griega, en los grandes relatos de viajes aparecían, y a mi me encantaban, ¡cuantas veces las soñé!
Besos amiga mía.
Sin duda, sólo el mar la conoce...
Me gustó tu mundo.
Besossss
Es curioso, pero todo el poema está resumido en tu nick: canto y vida (precioso nick, por cierto).
Un abrazo
Me recordò en algo, la leyenda de La sirenita en Dinamarca. Que linda historia, y me gustò mucho la pregunta final.
Besos.
Publicar un comentario